En 1977, el cacique de la junta, Diomedes Díaz lanza junto a Alberto López el álbum ‘Tres canciones’, pero en la fotografía de la caratula del trabajo discográfico, Diomedes aparecía sin un diente, lo que generó grandes críticas por parte de periodistas y seguidores, sin embargo, el artista optó por dedicarse a cantar porque era ese su prioridad en ese momento.
Tiempo después, se sometió a que le pusieran un implante para tener su dentadura completa. Pero en 1993, a manera de silenciar las críticas de los periodistas de aquel entonces, decidió que en el mismo diente que le faltaba en la caratula de ‘tres canciones’, le pusieran un diamante.
La piedra fue importada de la India, superaba, en aquella época, los 45 millones de pesos y en varias ocasiones afirmaba que para eso era “la plata que cae en mis manos, es para gastarla en lo que yo quiera”, cuenta Diomedes.
El diamante que iluminaba su sonrisa era algo que en Colombia no se había visto y que por supuesto llamó la atención de muchas personas, seguidores y detractores.
Al fallecer, los familiares del cacique de la junta, decidieron retirarle el diamante para evitar que su tumba fuera profanada con el fin de quitarle el diamante y de esa manera, pudiera descansar en paz.